Tengo un gran vicio, lo reconozco, me sigue chiflando aprender y tengo el irrefrenable impulso de apuntarme a cada nuevo curso que saca el servicio de perfeccionamiento de la Consejería de Educación de Canarias en la modalidad de teleformación. Esto de poder aprender en pijama es lo mío 😉
La cuestión es que hace unos días terminé uno sobre las famosas evaluaciones diagnósticas en Primaria, para 3º y 6º, cómo se han elaborado, etc.

Ya compartí en dicha formación mi opinión sobre las pruebas actuales y la necesidad de entender la evaluación competencial de manera más transversal y global, sin fomentar rankings, ni desmembrar las destrezas del alumnado ya que las dimensiones de cada competencia son mucho más amplias de lo que miden estas pruebas y precisarían además de una observación continuada y en situaciones de aprendizaje y contexto real.
La cuestión es que, nos guste más o menos, están y tener la oportunidad de conocer los entresijos de cómo se diseñan nos da la posibilidad de aportar nuestro granito de arena.
Comparto aquí la tarea final que realicé para la formación, creando una de las partes de la evaluación diagnóstica para tercero de primaria. En mi caso escogí la competencia lingüística y la destreza de comprensión escrita para 3º de primaria.
La cuestión es que a partir del texto creado podemos trabajar de forma transversal la Igualdad, ya que la protagonista es una niña que quiere ser científica, y la diversidad, ya que Isabel tiene dos mamás.
Utilicé además una de las preguntas con apoyos visuales para visibilizar los modelos de familia.
La cuestión es clara, no es preciso dedicar una charla específica ni un día concreto, en cualquier contexto tiene cabida la Igualdad y la Diversidad ya que forman parte de la realidad escolar y nuestra labor principal debe ser sacarla a la luz e hilarla con el currículum.